Mi turno

Después del mensaje del Guasón con su selección de lo mejor de 2007, yo voy a hacer una reflexión un poco más general.

En estas fechas he superado ya el período de un año como aficionado al mundo del cómic. Un año en el que he ido descubriendo poco a poco lo que podía dar de sí este mundillo, con tantas posibilidades como autores.

Mis inicios fueron con Marvel, ya que tenía una vaga idea de quienes eran algunos de sus personajes. El inicio en concreto fue Secret War, una miniserie que vista actualmente me hace pensar que esto es algo que tendría que haber descubierto antes, ya que no brillaba por su gran calidad, la verdad, y a pesar de ello seguí interesado por el tema. Luego vinieron Nuevos Vengadores, Jóvenes Vengadores, Dinastía de M...

Ya entrado el año 2007, descubrí eso llamado DC. El Guasón había hecho que desde pequeño yo ya conociera algunos personajes, hecho que, sumado a las diferentes películas que había visto hasta el momento, me daban un ligero conocimiento de dicha editorial.

El punto de partida fue una recomendación de don NadaComercial, la llamada Crisis de Identidad. ¡Bendita miniserie! Con ella descubrí un sinfín de personajes que no sabía ni que existían, todos interrelacionados y con muchísimas cosas nuevas que contarme. Luego me interesé por Batman, que me demostró que podía emocionarme leyendo un cómic. Y vino la Cuenta Atrás a Crisis Infinita, Crisis Infinita, 52...

Y aquí estoy, al pie del cañón. Esta, sin duda, se ha convertido en una de mis aficiones más importantes, si no la mayor. La variedad, sin duda, ha sido lo que me ha convencido. Aunque también ese gusanillo que se te queda en el cuerpo cual jubilado/a seguidor de un culebrón de sobremesa.

Por ello, como lo mejor de 2007, voy a votar, primero, a DC. Al completo. Porque Crisis de Identidad, los preludios a Crisis Infinita y la Crisis Infinita en sí estaban muy bien, pero con el Año Después todo se volvió una locura. Primero decidí apostar por Batman y sus derivadas, Jóvenes Titanes y Outsiders. Luego, acabé cayendo en todas. Green Lantern, Green Arrow, JLA, JSA, Jaque Mate... Incluso Superman, al que siempre el había tenido mucha manía. Recomendar una de ellas es difícil. Por ello, voto a cualquiera, a excepción de Nightwing y Robin, las cuales espero que acaben de despegar con algo más de calidad, para el iniciado en DC y para quien que venga nuevo. Porque todas empiezan de cero, o por lo menos permiten leer una historia sin saber nada anterior. La mención especial es, sin duda, para Catwoman. Desde la etapa pre-crisis hasta la etapa actual. Una serie que realmente evoluciona y con muchos personajes interesantes.




También es obligatorio recomendar todo aquello relacionado con Batman. Las obras que me han encandilado han estado, sin duda, Batman Black & White, Batman: 1 Año Después y Batman: Juegos de guerra. Imprescindibles. Mi mención especial es para Batman: Jekyll & Hyde. Creo que se ha hablado poco de una obra que ahonda en uno de los villanos por excelencia del Caballero Oscuro, ahondando en su personalidad y su infancia, resultando una historia cruel y triste como pocas, y, a mi parecer, muy emocionante.

Marvel ha seguido teniendo sus cosas buenas, a pesar de que me haya distanciado más. Sin duda, gran parte de la culpa la ha tenido Ed Brubaker. Todo lo guionizado por él me ha gustado, y casi todo me ha encantado. X-Men: Génesis Mortal, Capitán América, Daredevil...

Fuera de las dos grandes editoriales, he sido testigo de otras historias que me han encandilado.

El sello Vertigo me ha descubierto joyas como Los leones de Bagdad, obra emotiva como pocas y con un dibujo espectacular. Brian K. Vaughan ha conseguido que le siga a partir de esta última obra y de su Ex-Machina, el cómic que une política y superhéroes de forma magistral.

Robert Kirkman también engendrado historias impresionantes, con Muertos Vivientes e Invencible a la cabeza.

Otra obra que ha destacado pero ha sido poco triunfadora es Girls, de la que parece que de momento nos quedaremos sin ver publicados sus últimos números. Aprovecho desde aquí para pedirle a Planeta que haga el esfuerzo, ¡y a los lectores que compren los primeros números!

El tono gracioso en 2007 lo ha puesto Garth Ennis con su The Boys. Si bien el señor Ennis me cansa mucho, después de haber leído unas cuantas obras suyas, The Boys me gustó tanto que la incluyo entre las mejores del año. El autor se suelta la melena para producir una historia descarada al máximo y a la vez triste que no deja indiferente.

Por tanto, 2007 ha sido para mí el año en que he asentado el cómic como un elemento del más alto interés en mi vida, y algo muy agradable en lo que invertir mi tiempo libre. Para el resto de lectores no sé cómo habrá sido, pero para mí ha resultado un gran año.